Se que me tardé un poco en subir este capi, pero es que la neurona encargada de revisar y corregir se fue de vacaciones y no queria volver
El trayecto desde el club al apartamento de Mac transcurrio en medio de la niebla y en absoluto silencio. La siempre incallable Savannah estaba muda y distraida, y Mac estaba sumergida de la misma forma en sus pensamientos ¿realmente habia visto lo que creia haber visto o solo era la creación de una mente sobre cargada gracias al trauma y la tension? Por que no habia podido defenderse sola? A caso no ella estaba entrenada para sobrevivir en las situaciones más duras?
Despues de dejar a Savannah en su hotel, Mac regresó a su apartamento aun aturdida “ estoy en shock, pensaba”. Sin quitarse la ropa de calle se metio a la cama y en lo que parecieron segundos vio el ya familiar torbellino de colores.
- buenas noches mi amada- le dijo una voz aterciopelada al oido causandole que los vellos de la nuca se le erizaran de delicia.
- Harm- Mac suspiró- yo… no debo estar tan mal si puedo conjurarte en mis sueños, a menos que seas mi método personal para seguir cuerda. Si es eso tengo una imaginación excepcional
- ¿crees que no soy real?- le replicó en el oido- ¿Qué debo hacer para que me sientas real, ah? ¿tal vez esto?- acto seguido mordisqueó levemente el lobulo de su oreja, a lo que ella respondio con un gritito-¿o tal vez esto?- y le besó el cuello mientras le tomaba el seno derecho y le daba un ligero apretón- ¿soy real? Porque aun tengo formas de demostrartelo.
- ¡ya! Yo… no. Si eres real dime que fue lo que ocurrio hoy en el estacionamiento-Inmediatamente Mac sintió como los brazos de él se tensaban a su alrededor-dime
- Solo te asaltaron
- Mentira
- Verdad absoluta- replicó él
- ¿sabes? Largate de mi sueño si no me vas a hablar con la verdad
- Como desees, mi señora- acto seguido se desvanecio en el aire.
……
Mac despertó en la mañana de un humor de perros, “tal vez sea el shock… o tal vez no” deliberaba para si sin saber exactamente a que adjudicarle lo que le sucedia.
Su estado de humor no se puso peor al ver su escritorio en su oficina; cerros y cerros de papeles que debian ser revisados para mandar a los juzgados, archivos de pruebas para los casos asi como notificaciones y avisos; al parecer el dia iba a ser muy entretenido.
Al llegar el mediodia recibió una llamada de Savannah, invitandola a almorzar
- vamos, anda ¿si?- rogó ella por enesima vez
- no puedo Nia, ya te lo dije, tengo mucho trabajo atrasado- contestó tensa Mac mientras le daba vueltas al anillo de su abuela
- no puedes negarte el derecho de comer, ¿Qué daño le hace a tu trabajo que te robes una hora? Anda, ¿de que sirve el que supuestamente haya venido a visitarte si nisiquiera te veo
- no seas exagerada Nia,
- anda Mac, yo… yo venia a ver a mi amiga- dijo con voz cortada
- por dios Nia no comiences!!! ¿comenzar que? Es la verdad- y se le quebro la voz
- esto es chantaje- suspiró- esta bien, voy
- si!!! Lo sabia
- eres malvada
- ¿Quién es malvada?- le preguntó una voz femenina en la puerta
- Ah! Hola Harriet, la malvada es mi amiga Savannah, de Nueva Orleans
- La chica que te hacia sufrir en el instituto ¿no?- Mac asintió- quiero conocerla
- Y yo quiero conocer a la famosa Harriet, traela- contestó Savannah en la linea, Mac sabia que era mala idea- Nia, no creo que…
- Nos vemos en media hora, pasas por mi ok- le interrumpio y acto seguido colgó
- Creo que se aproxima una tormenta- murmuró Mac para si antes de dirigirse a Harriet- tenemos una invitacion para almorzar en media hora.
Mac regresó de su almuerzo más cansada que si hubiera corrido un maratón ¿la razón? Hoy habia cometido el gran error de juntar a Harriet y a Savannah para almorzar; en si la situación habia ido bastante bien al principio, habían platicado, y habían comido en relativa tranquilidad hasta que a Savannah se le ocurrió platicar sobre el incidente de la noche anterior.
Esto hizo que a Harriet se le encendieran todas las alarmas de mamá gallina y se pusiera histérica al escuchar gran parte de la historia, pero lo que en si remato fue el que se hablara del gran salvador de la noche, ante lo cual Harriet ahora se puso pero como madrina de presentación en sociedad.
- ¿de verdad te invitó a cenar?
Mac asintió con el rostro encendido y el estomago cerrado
- y no le pidió para una semana o dos ¡sino para hoy!- chilló Savannah
-relájate Nia que te va a dar un infarto- ladró Mac mientras revolvía su ensalada
- ¡¿Por qué me voy a relajar si esto es fenomenal?! Te dije que te debías deshacer de la rata y ¡mira! Ahora que estas solterita te encuentras a un mega bombón de metro noventa con unos ojos azul mar por el que cualquiera de nosotras…
- …incluyéndome yo, con el respeto que se merece mi amado esposo…- tercio Harriet
-… moriría o mataría por tener
Mac las miró con incredulidad, si no supiera mejor la situación, juraría que se pusieron de acuerdo para plantarle una trampa- Si es tan buen partido ¿Por qué no sales con el de mi parte Nia?
-porque a ti te lo pidió, tonta- contestó Savannah encogiéndose en hombros
Después de esto tanto Savannah como Harriet se pusieron a parlotear sobre lo que Mac debería usar. Mientras ellas decidían entre rojo o púrpura a Mac se le formo una incógnita en la cabeza ¿Cómo la encontraría Harm si no tenía más que su número de móvil?
Sin saber exactamente, un pensamiento cruzó por su mente: él te encontrará.
….
Justo al entrar a su oficina, Mac encontró sobre su escritorio un florero con doce rosas azules y una nota a su lado escrita en una caligrafía fina y perfecta que a Mac le resultó extrañamente conocida:
Tal como estas rosas son únicas en su género así eres tú de única en mi corazón.
Hasta la noche mi bella dama, yo sabré encontrarte
H